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Ahora que hemos visto la mandíbula, demos una mirada, a la articulación que le da movimiento: la articulación temporo-mandibular. Es una articulación sinovial, con cartílago articular en las superficies óseas, y cápsula articular que contiene el líquido sinovial. Es una doble articulación: hay dos cavidades separadas una encima de la otra. Están separadas por un disco articular que es flexible y muy móvil. Esta disposición, permite dos clases de movimiento como veremos más adelante.
Aquí se aprecia la apariencia de las superficies articulares en el cuerpo vivo: difieren marcadamente la una de la otra. La superficie articular del cóndilo es muy curva de adelante hacia atrás. Es casi puntiaguda en la cima. La superficie articular del hueso temporal, tiene una doble curva: esta parte cóncava es la fosa mandibular; esta parte convexa la forma una protuberancia descendente, el tubérculo articular.
Aquí se aprecia la articulación temporo-mandibular con su cápsula articular intacta. La mayor parte de la cápsula es delgada y laxa para permitir los variados movimientos que veremos. En el aspecto lateral la cápsula se engrosa por medio de este ligamento lateral.
El disco articular, está dentro de la articulación aquí. Para verlo, vamos a retirar parte de la cápsula por encima y por debajo de él. Aquí está la cavidad articular superior, y aquí está la inferior, entre ellas está el disco articular. Está hecho de tejido fibroso denso. Está adherido a la cápsula articular por todo el borde. Aquí está el disco articular aislado: Es delgado al frente y grueso en la parte posterior y, es bastante flexible.
Las dos clases de movimientos que pueden ocurrir en la articulación temporo-mandibular son: un movimiento de bisagra y un movimiento de deslizamiento adelante y atrás. El movimiento de bisagra tiene lugar entre el cóndilo y el disco, el movimiento ...
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Ahora que hemos visto la mandíbula, demos una mirada, a la articulación que le da movimiento: la articulación temporo-mandibular. Es una articulación sinovial, con cartílago articular en las superficies óseas, y cápsula articular que contiene el líquido sinovial. Es una doble articulación: hay dos cavidades separadas una encima de la otra. Están separadas por un disco articular que es flexible y muy móvil. Esta disposición, permite dos clases de movimiento como veremos más adelante.
Aquí se aprecia la apariencia de las superficies articulares en el cuerpo vivo: difieren marcadamente la una de la otra. La superficie articular del cóndilo es muy curva de adelante hacia atrás. Es casi puntiaguda en la cima. La superficie articular del hueso temporal, tiene una doble curva: esta parte cóncava es la fosa mandibular; esta parte convexa la forma una protuberancia descendente, el tubérculo articular.
Aquí se aprecia la articulación temporo-mandibular con su cápsula articular intacta. La mayor parte de la cápsula es delgada y laxa para permitir los variados movimientos que veremos. En el aspecto lateral la cápsula se engrosa por medio de este ligamento lateral.
El disco articular, está dentro de la articulación aquí. Para verlo, vamos a retirar parte de la cápsula por encima y por debajo de él. Aquí está la cavidad articular superior, y aquí está la inferior, entre ellas está el disco articular. Está hecho de tejido fibroso denso. Está adherido a la cápsula articular por todo el borde. Aquí está el disco articular aislado: Es delgado al frente y grueso en la parte posterior y, es bastante flexible.
Las dos clases de movimientos que pueden ocurrir en la articulación temporo-mandibular son: un movimiento de bisagra y un movimiento de deslizamiento adelante y atrás. El movimiento de bisagra tiene lugar entre el cóndilo y el disco, el movimiento adelante y atrás, tiene lugar principalmente entre el disco y la superficie articular del temporal.
La apertura y cierre normal de la mandíbula es la combinación de los dos movimientos. Si usted se pone su dedo aquí, puede sentir el cóndilo moviéndose hacia adelante a medida que se abre la mandíbula.
El movimiento hacia adelante del cuerpo de la mandíbula, es controlado por dos ligamentos ubicados por fuera de la articulación temporo-mandibular. Agregaremos estos ligamentos a escena después de ver los cuatro músculos principales que mueven la mandíbula.