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Hay una estructura muy importante que se debe incluir mientras se observa el tórax, el seno. El seno femenino varía mucho en tamaño y también en forma. De arriba abajo el seno se extiende desde el nivel de la segunda costilla, hasta la sexta costilla. De lado a lado, se extiende desde el borde del esternón, hasta la línea axilar media. Esta prolongación del seno atrás se llama la cola axilar.

Esta área pigmentada es la areola. Rodea el pezón, que es el punto en el cual los conductos galactóforos emergen.

Para ver la estructura interna del seno, quitaremos una mitad del mismo, a lo largo de esta línea. El seno consiste mayormente de grasa. Este es el seno de una mujer postmenopáusica, cuyo tejido glandular mamario se ha encogido a una muy pequeña proporción del seno completo. El seno se localiza directamente en frente de la fascia que cubre al músculo pectoral mayor.

Debajo de la areola, los conductos galactóforos-aquí esta uno de ellos- convergen en sus aberturas separadas en el pezón.

Esto nos trae al final de esta sección sobre el sistema músculo-esquelético del tórax. En la siguiente sección, veremos de una manera similar el abdomen.