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Avanzaremos para dar una mirada global a la cavidad oral y a algunas importantes estructuras, estrechamente relacionadas. Miraremos primero la forma y magnitud de la cavidad oral, luego miraremos los músculos de las mejillas y labios, luego los dientes y después las glándulas salivares.
Para entender la forma de la cavidad oral, y su extensión, veremos esto en un modelo vivo. Aquí está la lengua, aquí el paladar, aquí la cara interna de las apófisis alveolares del maxilar y de la mandíbula.
Las apófisis alveolares del maxilar y la mandíbula, junto con los dientes superiores e inferiores, se proyectan dentro de la cavidad oral desde arriba y abajo, dividiendo la cavidad oral en una parte interna y una externa.
Las encías superiores e inferiores (o gingivales), están formadas por una membrana mucosa que cubre las apófisis alveolares por fuera y
por dentro.
La parte externa de la cavidad oral, el vestíbulo, se encuentra entre los dientes y encías por dentro, y las mejillas y los labios por fuera. La membrana mucosa de los labios y las mejillas, se continúa arriba y abajo con la membrana mucosa de las encías.
La parte interna de la cavidad oral está cerrada arriba por el paladar duro, y más atrás por el paladar blando, que termina aquí atrás en la úvula. Está limitada abajo en gran extensión por la lengua y parcialmente por la membrana mucosa del piso de la boca.
Para estudiar las características de la parte posterior de la cavidad oral, veremos un espécimen disecado que ha sido dividido por la línea media. A este espécimen le hacen falta varios dientes.
La membrana mucosa que bordea las mejillas, pasa medialmente por detrás del último diente molar y se continúa con la membrana mucosa de la parte interna de la cavidad oral. El frente de la rama mandibular está aquí. Para ver toda la pared posterior de la cavidad oral en su extensión, moveremos el paladar blando hacia atrás.
Este pliegue en la membrana mucosa, que va desde el paladar blando hasta el lado de la lengua, es el arco palatogloso. Actúa como un dique, previniendo que el líquido ingerido se rebose por el lado de la lengua. Este pliegue menos notorio es el arco palatofaringeo.
Este triángulo entre los dos arcos está ocupado en la vida temprana por una masa prominente de tejido linfoide, la amígdala. En la vida tardía, como en este espécimen, la amígdala se atrofia. Aquí está el arco palatogloso en una persona joven. Aquí detrás
Estudiaremos el paladar blando junto con la orofaringe, al final de esta sección.